miércoles, 13 de febrero de 2013

UNA LLAMADA EQUIVOCADA...


Buen día y comienzo de Buenas tardes.

La semana pasada recibí una llamada por mi cel. Una voz de mujer preguntó si era... no entendí bien el nombre, pero me sonó al nombre de "Chelique" Por esta razón di mi nombre. La señora me saludó entonces cariñosamente, y con una gran amabilidad y me dice que había marcado mal el número al cual quería llamar y marcó el mío. 
Claro que ella me conocía, pero a veces no me gusta preguntar ¿quién es?, sino que sigo oyendo a ver si logro saber a quien pertenece la voz que oigo. Pero, no lograba reconocer la voz. Me dijo que recientemente habían estado hablando de mi, su esposo Juan y ella. !Caramba! aparece un nombre de Juan ahora, y además en una conversación entre ellos. Y nada que logro adivinar el timbre de esa voz. 
La señora me dice que Juan por fin logró escribir el libro que tanto deseaba. Otro dato importantísimo para atar cabos pero... no me llegaba nada. La señora me dice; te voy a pasar a Juan que sabe que estoy hablando contigo y quiere saludarte. Muy bien señora, pásemelo, le digo. Quería oir la voz de Juan y así quizás sabría de una vez quienes eran de una vez los dueños de esas voces. 
El saludo de Juan fue, !caramba!, muy efusivo y esto me ponía en un estado de preocupación aún mayor. Yo seguí respondiendo, y oyendo a ver si llegaba el dato necesario para saber su nombre. Y llegó el dato de esta manera; sabes que escribí por fin el libro, y lo pude hacer "gracias a ti". 
En lugar de mejorar, empeoró mi situación con ésto que escuchaba en la voz de Juan. 
Y siguió... ¿recuerdas? la vez cuando viniste a mi casa y trajiste un grabador pequeñito, y con eso grabamos tu programa? Te comenté que quería escribir un libro pero yo quería escribir apuntes de cosas que recordaba, pero por no hacerlo se me iban. !Te nombro ahí en mi libro!... 
Imagínense; Y yo le dije a Juan que consiguiera un grabador como ese, y ahí podía grabar todo lo que recordaba y luego lo escribía. Que su hijo se lo podía enviar, ya que vive fuera del país. 
La luz llegó con !la velocidad de un rayo! El programa, En La Matica, si existe el grabador Zoom, 
y si fui con Edgar Salazar a la casa de el maestro Juan Vicente Torrealba, y la voz es de su esposa Mirtha.
 La conversación se extendió por un buen rato. Y si fue el maestro Juan Vicente Torrealba profesor de todos los arpistas que comenzamos con el instrumento por allá, por los 60 oyendo todos sus discos y copiando al dedillo ( o tratando de hacerlo) la manera nueva, para ese momento, de hacer la música llanera de nuestro país. 
La cita quedó para uno de estos días, en su casa para recibir de sus manos su libro, y de mi parte llevarles el CD de Los Cuñao´s donde grabamos su tema "SUEÑO LLANERO", con letra de Germán Fleitas Veroes y en la voz de María Teresa Chacín, y un "solo" de Daniel Somaroo. 

3 comentarios:

  1. Respuestas
    1. Gracias Inger.

      Espero estés restablecida totalmente de tu pié.

      Un abrazo

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  2. Lo dicho hasta fastidiarlo.

    CUÑAO MAYOR..., ESCRIBA, ESCRIBA, Y VUELVA A ESCRIBIR!!!

    Qué buena historia.

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